Mea culpa amigos, por que mis temores hacen que me despiste cuando todo empieza.
Verán, la cosa es que Javi Lacrema sube arriba y empieza a pinchar el celebérrimo “Another Brick In The Wall Pt2” de Pink Floyd y capta la atención inmediata del publico y, por supuesto, de un servidor. Y luego sale la protagonista.
La segunda jornada del festival comenzaba con Lasole (no confundir con la artista argentina), congratulándonos de que sería notoria la crecida de asistentes, y su comparecencia que a la sazón sería una de las mas espectaculares.
Pero el que suscribe que había seguido con atención la puesta en marcha de la obra conceptual de la de Granada, me refiero a “Las Mujeres de la Biblia” y sus diferentes actos con Pablo Gareta a la producción, no creía que fuera nada fácil trasladarlo al directo. Y conste que una declaración de la protagonista en IAmRap ( Noé Valtierra, 22 junio 2022) había llamado mi atención cuando aseveraba que “No comprendo el arte sin que sea un todo”, pero aún así no negaré que no lo veía. Y miren por cuanto en un tiempo mínimo (no hace falta más, como luego se vio con la inexplicablemente larguísima comparecencia de Nadal y Miranda), demostró lo equivocado que estaba.
Con un show, “Lasole y sus personalidades” que aúna imagen y sonido (aunque como me explicaron luego los dos, en Béjar se presentó mas mermado) y en el que habla sin tapujos ni tonterías de temas tan importantes como el feminismo o la salud mental (Anier el día antes también lo había hecho), dio un pase monumental lleno de momentos de brillantez desde que abrió con “Fok Them” y su no me olvido del Boom Bap, acompañada de un intachable trabajo atrás de Lacrema.
Cantó y bailó con recursos y aplomo de grande, les reto a que busquen a alguien que no pensara en Bad Gyal en algunas partes pero no van por ahí los tiros, “Yano” y “Crucifixion” fueron mundiales, y le dedicó en uno de los momentos del bolo “Pastillas” a su psiquiatra. Los detalles que enseñó, los aires poperos y aflamencados de “Semillas”, el ritmo que esgrime “Perros” o esa especie de catarsis personal que es “Radio Jodidas” que funciona muy bien en directo, ayudaron es cierto, pero el tema es que lo de artista emergente ya le va pequeño.
Marta puede estar muy orgullosa y yo me como mis miedos.
Si dentro de unos años hacemos cola por entrar a verla, no digan que no lo advertí.
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