Domótica: ¿nos facilita la vida, o nos hace más vagos?

Si bien inicialmente los españoles se mostraron reticentes a incluir en sus hogares sistemas que automatizaban determinadas tareas. En la actualidad, son cada vez más los hogares que cuentan con estos sistemas de automatización que entre otras cosas les permite ahorrar. Y es que, como indican desde la empresa Tecnisat, son muchos los que desean incluir la tecnología en sus hogares para conseguir un mayor grado de comodidad y confort además de un ahorro energético.

Sin embargo, muchos de ellos, no saben que a eso se le llama domótica, En cualquier caso, y se le llame domótica o de otra manera, lo que está claro es que las nuevas tecnologías hicieron también aquí su incursión, y como no podía ser de otra manera, su campo, como en el resto de los ámbitos, es cada vez más amplio. Lo que comenzó siendo un simple sistema automático que subía y bajaba las persianas para conseguir una mayor eficiencia energética, se ha ido transformando en hogares que conocen los gustos de sus moradores y que son capaces de sugerirle determinadas cosas que se ajustan a sus preferencias. Los profesionales del área, comentan que “en la actualidad son los clientes los que determinan el grado de automatización que desean que tenga su vivienda. Sin embargo, no debemos olvidar que la domótica va ligada al desarrollo de otras tecnologías, por lo que, de momento, no todo es posible”.

La domótica persigue fundamentalmente los siguientes objetivos: Mejorar la eficiencia energética, consiguiendo de esta manera un ahorro en los consumos, que se traduce en un ahorro de dinero. Conseguir el máximo confort de los usuarios y garantizar su seguridad. Mejorar la interfaz hogar-usuario, facilitando los medios que permitan una mejor accesibilidad. La domótica, que representaba un imposible hace años, se ha convertido en un sueño hecho realidad, sobre todo, para aquellos más vagos a los que les cuesta un trabajo horroroso levantarse del sofá.