Por Son hoy una estafa estas líneas, y el que suscribe es un timador barato tratando de venderles que podría hacerlo por que, simplemente, no me considero capacitado para escribir de los protagonistas de la tercera noche de los conciertos de las ferias, ya que no se nada de una carrera que se aleja de gustos y universos personales. Cualquiera, estoy seguro, del equipo de esta casa lo podría hacer un trillón de veces mejor, pero si les diré que el esperado primer llenazo de no hay billetes con cierre de la plaza incluido, se materializó como estaba previsto.
Les diré también que el impresionante trabajo de quienes velan por la seguridad y por que todo vaya bien en los conciertos, vuelve a ser manifiesto. Es curioso como con lo importantes que son, nadie parecemos acordarnos de su quehacer callado y sordo, dándolo por sentado. La experiencia de poder asistir en estas noches a tan gigantescos bolos, es posible en gran parte por su dedicación y para muestra no había mas que ver como se/nos cuidaron en una noche tan complicada con la cantidad de gente que abarrotó la plaza.
Cuando entro, me congratulo de la mezcla absoluta de edades, eso no se le puede discutir, que logran conciliar y poner de acuerdo los protagonistas. Mucha gente con la media alta es cierto, pero también toneladas de jóvenes al rebufo de las canciones del dúo. El poso que han dejado en géneros, sobre todo del palo de la Urbana, como el Trap es evidente, y no necesita de discernimientos sesudos para probarlo. Una anécdota personal. En el fake cuestionario que un servidor ha hecho a amigotes y demás sobre el line-up de las ferias de este año, el puesto de Camela no parecía discutible entre una abrumadora mayoría.
Las caras de felicidad, los bailes y los cantes a pulmón en un pase lleno de épica sana en la parte final, lo refrendaron.
Estos conciertos entre semana que otros años un servidor llamaba noches de profesionales por que admitían otro tipo de propuestas, este año van a sumarse a las noches de cierre obligado de los fines de semana por motivos, me refiero a los artistas programados, obvios, y eso en mi humilde opinión es estupendo. Poder ver los escenarios, me he perdido hoy el pase del Elio Antonio de Nebrija por no llegar a tiempo, tan llenos de gente, con las calles a reventar de ambiente y calor de fiesta es un must amigos.
Eso son las ferias para mi.
Mañana hago novillitos por el mismo tema que hoy.
Ah, la coherencia. Cuando vuelva enfilamos la recta final y madre mía lo que queda.
Fotografías: Roberto Gallego
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