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Hace ya diez años desde que Samsung presentó su primerísimo Galaxy, el Samsung Galaxy S. Desde entonces, la evolución en los dispositivos de la firma coreana ha sido muy clara. Pero ha sido esta semana donde, tras diez años, han tirado la casa por la ventana en la que posiblemente sea la presentación más importante de la historia de Samsung.
A pesar de que queden muy pocos días para el pistoletazo de salida del Mobile World Congress, Samsung no ha querido esperarse y ha presentado sus novedades en San Francisco para no compartir escenario con otras marcas.
No podemos decir «el» Galaxy S10, porque hay tres versiones diferentes del terminal: Galaxy S10, Galaxy S10 + y Galaxy S10e. Los nuevos lanzamientos destacan en tres apartados clave: fotografía, hardware y pantalla.
El Galaxy S10 en su versión «normal» muestra un modelo intermedio y equilibrado en cuanto a prestaciones. Lo más destacable de este nuevo lanzamiento es el panel bautizado como Dynamic Amoled. Este panel incorpora una certificación HDR 10+ en una pantalla de 6,1″ en calidad QUAD HD+. La pantalla cubre el 93,1% del frontal e incorpora una pequeña mueca en la parte superior con los sensores frontales. Otra de las funciones estrellas es el lector de huellas ultrasónico situado debajo del cristal de la pantalla. Es capaz de leer los contornos de nuestra huella dactilar desbloqueando instantáneamente el dispositivo.
El procesador es, al igual que las otras versiones, el flamante Exynos 9820 y alimentado con 8GB de RAM para garantizar fluidez y un funcionamiento eficiente. Su precio es de 909 euros.
La revolución en este dispositivo está en las cámaras. Una triple cámara trasera, con un teleobjetivo de 12 mpx, un Gran Angular y un Ultra Gran Angular todos acompañados por estabilización de imagen por Inteligencia Artificial. Los sensores son capaces de trabajar combinados para ofrecer un abanico de posibilidades y mejorar los resultados finales.
El Galaxy S10+ incorpora todas las prestaciones mencionadas anteriormente además de una pantalla algo más grande (6,4«), una versión opcional de 12GB de RAM y un crecimiento de la batería hasta los 4,100 mAh. La cámara frontal también mejora aumentando a dos el número de sensores en el panel frontal. De esta manera, el modo retrato estará disponible para los selfies. Su precio va de los 1,009 euros a los 1,609 euros dependiendo del almacenamiento que necesites.
En cuanto al Galaxy S10e, la versión «light» del lanzamiento: el procesador elegido es el Exynos 9820 (En EE.UU será el Snapdragon 855). El corazón del terminal estará acompañado por una memoria RAM de 6 u 8 GB y la cámara dual incorpora un sensor Gran Angular de 12 mpx y un Ultra Gran Angular de 16 mpx.
La batería en esta versión es de 3.100 mAh e incorpora carga rápida (cable e inalámbrica). La pantalla que incorpora es de 5,8″ Full HD+ y copia las demás características de sus hermanos mayores. El precio de este terminal «lite» en España será de 759 euros.
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