Aún no doy crédito amigos.
Que en pleno comienzo de las vacaciones, con todo el mundo marchándose o ya fuera, y los de casa a otras cosas, el hombre fuera capaz de congregar una entrada tan abultada, se despacharon mas de cien tickets ojo, es una heroicidad, y viene a demostrar el poder de convocatoria del que goza ahora el de la sierra de Madrid. Alberto Olmos en un articulo sobre el protagonista de la noche para El Confidencial (1-05-23) lo explicaba bien claro: “el Rap en castellano se gana calle a calle, barrio a barrio y nicho a nicho”. Efectivamente.
Y aún reconociendo, mea culpa, que el motivo de no querer perderse la noche del que suscribe era ver si había para tanto del hype que se había levantado a su alrededor, gracias sobre todo a la sobreexposición de “Brixton” y sus barras con el celebérrimo “donde está Sturridge” a la cabeza, no creo que nadie que estuviera allí, incluyendo a un servidor por supuesto, se marchara con descontento o con decepción de lo que se vio.
Se trajo para abrir a Ardo 440 y a D Palermo que calentaron el escenario y dejaron con ganas de mas, es cierto, pero aquello cogió otro rumbo cuando a ritmo de “Intimissimi” arrancó esa forma hosca y directa que tiene de rapear y nos golpeó con ella. Echando cuentas no recuerda un servidor un bolo en el que esas frecuencias tan básicas en las producciones de los últimos tiempos, hablo de los subgraves claro, apabullaran tanto como los que se pulió Delson Aravena a los controles de todo el tinglado. Estuvo magnifico y sus bases fueron el autentico motor del pase, mientras el hombre hacía magia con los fraseos, “Mariví Bilbao” y “Pichichi” seguidas casi sin respirar, y las barras, ya me contarán de algo como “Tutankamon” o “Bankinter”, que se marcó, fueron de nivel.
Fue al turrón afortunadamente, sin apartarse de el mas que para un escueto y sincero agradecimiento al publico que había ido a verle y la mención final a Aravena, y con su imponente presencia escénica nos enseñó en a capela algo de material nuevo, mientras atacaba una, “McDonald´s” “McAfee” “Tyrion”, tras otra de un setlist corto, no volvamos a esta discusión si les parece, pero mas que colmado de momentos intensos.
Y si. “Brixton” fue una fiesta.
Llevar la conversación a si dentro de pongamos diez años hablaremos de el está de mas, mientras nos los siga haciendo pasar tan bien.
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