No se si les pasará pero a mi me asalta constantemente un temor irracional por estar perdiéndome tal o cual cosa que la brutal, e inabarcable ya de paso, escena que tenemos, nos esté deparando. Hace unos días cuando Trashi ponían en circulación su segundo EP, el esclarecedor “Quiero Irme a Casa”, y me enchufaba en loop esa joya de orfebrería que es “Playa Flamenca”, volvía a tener la misma sensación.
Y no será por que la banda no haya recibido atención, ya antes que mutaran al actual proyecto con los seminales y jovencísimos Jump To The Moon han estado en boca de todo el mundo, desde que de su Murcia natal primero y desde Madrid después irrumpieran según los entendidos (¿…?) en el panorama del bedroom Pop patrio, cosa que en opinión del que suscribe es una soberana memez, han llevado pegada la etiqueta de “the next big thing” a ellos con cierta asiduidad .
Escribía Mikel Izarra en la crónica del paso de la banda por Bilbao hace unas semanas (Mondo Sonoro 20-03) que son “una banda difícil de clasificar y al mismo tiempo fácil de adivinar…”. Cuando llego a La Chica, la verdad, no lo tengo tan claro. Sergio Nicolás, María Lázaro, Luis Morera y Luz Abril logran juntar una audiencia meritoria a años luz de llenar, pero que sabían perfectamente por que estaban allí cuando con “Ya Nooo” abrían la noche y arrancaban una comparecencia que solo en la ultima parte a mi entender, justificó el porque del revuelo a su alrededor.
Y es que fueron de menos, Nicolás no estaba por la labor y además lo dijo y eso hace que el foco de casi todas las miradas no responda a las expectativas, a mas con una primera parte “Mal, Mal”, “Brillito”, “Co-Star” (hicieron todo el ultimo lanzamiento al completo) en la que les costó arrancar, el poper de no se quien fue mas protagonista, hasta que llegó la revisión, estupenda, del “Fiebre” de Bad Gyal y de ahí al final en la segunda parte del, nada que objetar como digo siempre, cortísimo pase, aquello remontó un poco.
Me reafirmo después de haberla visto en el escenario que “Playa Flamenca” es un temón con tintes épicos que nos dará muchas alegrías si todos reman en la misma dirección, Morera en la guitarra estuvo muy acertada, y aunque “Mañaneo” ( ¿echamos de menos a Ladroga?, nah) “Dime que si” y “Soltarnos” hicieron bailar tímidamente pero bien al fin, parece un balance demasiado escuálido para un grupo que debe, y puede me consta, hacerlo muchísimo mejor.
La próxima.
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